Fue creada por doctora Ingrid Briggiler (ginecología y obstetricia), quien espera que la aplicación sea apoyada por ministerios de salud del país.
La doctora Ingrid Briggiler, especialista en ginecología y obstetricia, ingenió una manera de ajustar las facilidades de la comunicación al ejercicio de la medicina. Lo hizo a través una aplicación móvil descargable en el teléfono celular.
“Llamando al doctor” es un servicio digital que conecta a pacientes y doctores de determinada especialidad en una consulta que se realiza por videollamada a cualquier hora del día. El objetivo del proyecto, aún en estado beta, es prevenir las complicaciones por demora en la atención médica primaria en casos de baja complejidad, y democratizar la salud con una herramienta virtual que resulte confiable para los pacientes y rentable para los médicos.
—¿Cómo nació Llamando al doctor?
Se me ocurrió en la Facultad, cuando veía que todos los profesores recibían llamadas de sus pacientes a cualquier hora del día, interrumpían las clases y solo podían ofrecer respuestas cortas; además, ese profesional cuando colgaba pedía muchas disculpas. Entonces me dije, “tiene que haber una forma de hacer esas consultas más formales, que queden registradas en una historia clínica, que el médico pueda definir en qué horario puede recibir llamadas y en qué horario no y a su vez pueda cobrar honorarios”, y eso fue lo que hice. Me fijé en si había aplicaciones similares en el mundo, y por suerte sí. Había aplicaciones en Europa y en EEUU que ya estaban funcionando, lo cual le dio más fuerza a mi idea.
—¿Cuáles considera que son los beneficios de la app tanto para el médico como para los pacientes?
El principal objetivo es que sea un sistema de salud Premium, de altísima calidad, orientado al paciente.
Para el paciente tiene varias ventajas, una de ellas es que tiene acceso a atención médica altamente calificada de manera inmediata. Esto quiere decir, por ejemplo, que si vos llamás de cualquier parte del país a un pediatra, te atiende especialista del (Hospital) Garrahan y eso es muy valorado por los usuarios. Y la inmediatez, también, porque cuando uno tiene una consulta de salud de baja complejidad queremos tener la respuesta de manera inmediata.
Por ejemplo, el paciente tiene el resultado de una ecografía en la que aparece una palabra desconocida y no quiere esperar 15 días hasta ir al turno y preguntarle a su médico. Entonces, llama a un especialista a través de nuestra aplicación y resuelve su duda. A los médicos, por su parte, les permite organizarse y atender consultas telefónicas sin dejar de cobrar honorarios profesionales.
—¿El servicio es gratuito para los usuarios?
Nosotros tenemos tres tipos de usuarios: prestadores de salud, que son prepagas, obras sociales, sindicatos, mutuales; empresas privadas que prestan servicios, como bancos, aseguradoras o financieras; y, por último, empresas que quieran sumar este beneficio para sus empleados. Entonces, en todos estos casos el usuario final no paga porque su proveedor de servicio se lo está dando, pero por el momento no está abierta al público en general.
—¿Estará disponible al público en general alguna vez?
Sí, queremos atender en el futuro a gente que no tenga cobertura, por eso estamos en conversaciones con los ministerios de Salud de diferentes provincias. Lo que proponemos es que el Estado pague por este servicio y que el beneficiado final sea el ciudadano. Es un ahorro impresionante en cuanto al presupuesto del sistema de salud.
—¿Se ha encontrado con detractores de la aplicación en la comunidad médica y científica?
Sí. Hay algunos profesionales de la salud que tienen miedo de que este tipo de sistemas les “saque” trabajo. Pero no es así; es todo lo contrario. Lo que hará “Llamando al doctor” es optimizar el trabajo.
Esta es, además, una tendencia mundial, no es algo nuevo, por lo tanto, el profesional médico o se adapta o queda fuera del nuevo sistema que los pacientes utilizan para las consultas. Creo que los médicos tenemos que adaptarnos a las nuevas tecnologías de comunicación y vamos a tener que poner foco en el paciente. Si el paciente quiere comunicarse con nosotros de manera informal, vamos a tener que darles herramientas. Hoy los pacientes no escriben por WhatsApp, nos mandan mails, nos agregan a Facebook para mandarnos mensajes. El paciente tiene una demanda y deberíamos cumplirla, y qué mejor que hacerlo con una herramienta que esté regulada, donde se pueda guardar datos de la historia clínica y donde además podamos cobrar honorarios.
—¿Cómo se hace la selección de los médicos que quieran ser parte de la aplicación?
Nosotros no tenemos, por ahora, un sistema abierto de inscripción para médicos. Lo que hacemos es invitar a los profesionales que queremos que se sumen, capacitarlos, formarlos y luego incorporarlos a esta red, para que sean siempre médicos que tengan al menos los mismos criterios y la misma calidad.
—¿Cómo es la formación que se les da a los médicos para trabajar en Llamando al doctor?
El criterio de cada médico no cambia. Si a un médico le parece que hay que derivar al paciente, lo deriva; si le parece que hay que revisar algo, lo manda a revisar. Tenemos una tasa de resolución de consultas de un 75%, sin examen físico ni nada.
Se les explica cosas como cuáles consultas pueden atenderse y cuáles no, y se acuerda que vamos a prescribir solamente cuando sea necesario y no por solicitud de los pacientes. También, si un paciente tiene un caso que amerite seguimiento, vamos a garantizarlo fuera de la aplicación. También hacemos formación técnica para el manejo de la aplicación: cómo cargar el diagnóstico, cómo cargar la historia médica, cómo hacer una receta electrónica, etc.
—Si el usuario llama a un doctor y este está ocupado ¿la aplicación lo deriva a otro automáticamente?
Exacto, la idea es que el paciente llame por especialidad y entonces, en esos casos, no sabe quién lo va a atender pero sí sabe que es de la especialidad que necesita. Puede ocurrir que el paciente, por ejemplo, quiera hablar con un pediatra y le atienda la doctora Clara, por decir un nombre. Y el paciente quiere verse siempre con ella, pero si la próxima vez que llame la doctora Clara no está disponible, el sistema le va a recomendar a algún otro profesional de su especialidad.
—¿Cuáles son las metas de Llamando al doctor a corto y mediano plazo?
Nosotros queremos ser el genérico de las consultas virtuales entre médicos y pacientes. Queremos democratizar el acceso a la medicina, que todas las personas puedan tener disponible un médico, bien sea porque están lejos de los centros de salud, no tienen cobertura, etc. Que todas las personas puedan acceder a la atención calificada de un profesional. Ese es mi objetivo. Que el día de mañana cuando la gente piense en atención médica, diga “Bueno, puedo ir a una guardia, puedo pedir la visita de un médico a domicilio, puedo sacar un turno en un consultorio, o puedo Llamar al doctor”.
Dra. Ingrid Briggiler
Médica de la Universidad Nacional de Rosario.
Especialista en ginecología y obstetricia de la Universidad de Buenos Aires.
Creadora de la app “Llamando al doctor”.
Jefa de residentes de ginecología en la unidad asistencial por Más Salud Dr. César Milstein.
Redactora del portal de ciencia y tecnología Hipertextual (2005-2010).
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